ES
Belén Benavent Cortés (1999, Madrid, España) construye su práctica artística como una forma de documentar y dignificar la vida cotidiana en contextos urbanos del sur global. A través de un lenguaje pictórico vibrante, donde el color se convierte en protagonista, captura escenas que transcurren en la calle: espacios de tránsito, trabajo, encuentro y resistencia.
Su obra nace de la inmersión directa en los lugares que retrata —como Douala (Camerún), Calcuta (India), Marruecos, Cañada Real (Madrid)— donde observa, recorre y convive con las dinámicas sociales que conforman la vida común. Esta cercanía con lo vivido se traduce en imágenes que fusionan observación empática con una estética intensa y personal. Las motos, los mercados, los cuerpos en movimiento, el ruido y el calor se transforman en materia pictórica, celebrando la fuerza y la complejidad de lo cotidiano. A través de composiciones densas y una paleta cromática saturada, Belén no solo representa la realidad, sino que la amplifica: da visibilidad a lo que suele pasar desapercibido. Su interés no está en lo espectacular, sino en lo esencial: en cómo las personas habitan el espacio, trabajan, resisten y se conectan.
Más que ilustrar, su pintura propone una forma de estar en el mundo: atenta, comprometida y con una mirada que busca justicia visual. Como ella misma afirma: "He descubierto mi camino: no quiero hacer obras decorativas que no vayan a ningún lado; quiero contar algo, transformar mi experiencia en un puente que permita ver, sentir y, tal vez, acercar al mundo otras realidades, realidades que pasan desapercibidas."
EN
Belén Benavent Cortés (1999, Madrid, Spain) builds her artistic practice as a way of documenting and dignifying everyday life in urban contexts of the Global South. Through a vibrant pictorial language, where color takes center stage, she captures street scenes: spaces of transit, labor, encounter, and resistance.
Her work stems from direct immersion in the places she portrays —such as Douala (Cameroon), Kolkata (India), Morocco, or Cañada Real (Madrid)— where she observes, explores, and lives alongside the social dynamics that shape daily life. This closeness to lived experience is translated into images that fuse empathetic observation with an intense, personal aesthetic. Motorbikes, markets, bodies in motion, noise, and heat become pictorial material, celebrating the strength and complexity of the everyday. Through dense compositions and a saturated color palette, Belén not only represents reality —she amplifies it: bringing visibility to what often goes unnoticed. Her interest lies not in the spectacular, but in the essential—how people inhabit space, work, resist, and connect.
More than illustration, her painting proposes a way of being in the world: attentive, committed, and driven by a vision that seeks visual justice. As she herself puts it: "I’ve found my path: I don’t want to make decorative pieces that go nowhere; I want to tell something, to turn my experience into a bridge that allows others to see, feel, and maybe draw closer to other realities—realities that often go unnoticed."